La semana pasada nos preguntamos qué tanto estaría la industria mexicana a la altura para afrontar un crecimiento como el suscitado recientemente en el sector automotriz. Esta semana quisiera atender a este fenómeno y encaminar mi charla hacia las herramientas para encarar dicho crecimiento.

Al colocarse México como el cuarto mayor exportador de vehículos ligeros alcanza a impactar positivamente en otros sectores relacionados. Uno de ellos es la industria del plástico. Este empuje se da en el contexto de una producción automotriz record en nuestro que alcanza los 2.5 millones de unidades. Por lo tanto, la demanda de plásticos y hules con los que se fabrican empaques y embalajes tendrá un incremento sustancial: la producción de plástico proyectada para este año es de 6.2 millones de toneladas de plástico contra los 5.8 millones de toneladas producidas en 2011. Este escenario obliga a las empresas del ramo a incrementar su producción mediante una Estrategia de Crecimiento LeanSigma que garantice un flujo de trabajo más eficiente. La capacidad exportadora nacional depende del aprovechamiento de esta oportunidad.

Quizás como primera estrategia debemos concentrarnos en la Demanda del Consumidor para establecer un Despliegue de Políticas Hoshin Kanri. Al seleccionar objetivos específicos podemos implementar proyectos para alcanzar nuestro objetivo. Establecer con claridad las metas nos permite alinear nuestros recursos para establecer metas cuantificables.

Dado que hemos estado hablando del plástico, ¿qué otras ramas de la manufactura comprende la industria del plástico?