La empresa de uno de nuestros clientes fue vendida por el grupo de capital privado que la poseía desde hace tres años. Durante esos años, el aumento de los ingresos fue del 40% y el EBITDA un 75%. La implementación de los principios lean básicos jugaron un papel fundamental mediante la mejora de la eficacia y el aumento de las capacidades de Creación de Valor.

Cuando el primer grupo de capital privado adquirió la compañía, TBM fue contratado para ayudar en la transición inicial a una empresa más rentable. Adicional la implementación de los principios lean básicos, también se comenzó a implementar un sistema de gestión lean denominado estrategia de implementación. Después de varios eventos kaizen exitosos, era evidente que el equipo directivo necesitaba una visión clara de cómo el negocio lograría sus objetivos de crecimiento y rentabilidad a tres años. Con ayuda de TBM, el equipo ejecutivo lanzó un despliegue de estrategia de creación de valor. A través de este proceso, los líderes desarrollaron estrategias para lograr sus metas anuales, lo que les permitió centrarse en los objetivos clave de mejora que les llevaría allí.

Mediante la definición de los objetivos anuales de crecimiento de los ingresos y reducción de costos, el equipo fue capaz de ligar iniciativas específicas a objetivos diarios que podrían ser rastreados en toda la organización. Los supervisores utilizan estos objetivos diarios para gestionar el desempeño de sus plantas y apoyar los objetivos mensuales, haciéndolos así acumulativos y después anuales en la creación de valor. La estrategia de despliegue proporciona la estructura y gestión de la creación de valor del sistema, necesario para mantener a toda la empresa alineada en torno a las estrategias y los objetivos. El desempeño de la planta se midió diariamente, mientras se hicieron exámenes mensuales para mantener el equipo de gestión alineado y centrado en los objetivos de tres años. Identificar las pérdidas e implementar contramedidas, se convirtió en el trabajo estándar de todos.

Adicionalmente, la planificación regular de eventos Kaizen, ayudó a apoyar los objetivos generales de la empresa. El resultado inestimable de este sistema de gestión fue estructurar contramedidas para combatir las pérdidas, estas contramedidas fueron determinadas y aplicadas de inmediato debido a que se necesitaba rendir cuentas a todos los niveles de la empresa en una forma clara, visible y verídica. La experiencia de la compañía ilustra que un sistema de gestión robusto ayudando a las empresas en el logro de metas y objetivos, pero, la creación de valor y el despliegue de estrategias proporcionan el fundamento y la disciplina para conseguir los objetivos que conducen a la consecución final de dichos objetivos.